Historia de un milagro 100% real.

Yo no creo en los milagros hasta esta tarde que viví uno de primera mano.

Primero que nada esta historia es 100% real no le estoy añadiendo ni quitando, todo pasó tal cual.

Te invito a leerla escuchando al mismo tiempo esta canción a todo volumen para añadirle más drama a esta apasionante historia. No me importa si tus papás ya se durmieron, súbele todo el volumen y abre las ventanas para que en la calle se escuche y se sienta la gloria.




Hace unas semanas sufrí un accidente, mi Ipod video de 160 GB cayó un metro al piso de mi mesa por usarlo como lámpara en la oscuridad. 

Al prenderlo la pantalla se hizo blanca, no se veía nada en absoluto pero se escuchaban las canciones, pensé que tenía salvación conectándolo a la laptop y que se sincronizara con Itunes, la pantalla siguió en blanco.

Investigué en Internet cómo podría solucionar mi problema, si mi asunto no era tan grave existe una reparación, si la cosa estaba mal, no solamente tenía que llevarlo a reparar sino que invertiría una gran cantidad de dinero y posiblemente despedirme de mi mejor amigo...

Las soluciones en Internet de nada me sirvieron pues mi Ipod tenía la pantalla en blanco como si estuviera en coma, estado vegetal, ya sabes...

Mi ipod se había convertido en Gustavo Cerati, una máquina de música apagada.

 La cosa como era de esperarse se puso mucho peor al punto al que el horrible blanco de la pantalla cambió a gris y en cuestión de minutos comenzaba a apagarse solo, al principio pensé que la pila se había acabado pero tras largas horas de tenerlo conectado simplemente ya no quería prender y cuando prendía la pantalla era gris.

El duelo que sentí fue tremendo, ni siquiera tenía dinero para llevarlo a un hospital para ver si había una esperanza para él, si aún servía o de menos, despedirme, decirle: hasta nunca mi viejo amigo.

Gustavo Cerati... Digo, mi Ipod, quedó en el olvido en un rincón de mi habitación, empolvándose. Unas dos o tres ocasiones intenté volver a conectarlo pero era inútil no servía de nada, estaba muerto.

Hace unos días, tal vez ayer o antier... no recuerdo, tuve un sueño donde me reencontraba con él en un campo de margaritas corriendo hacia el horizonte, viendo el atardecer, escuchando aquellos temas que nos marcaron en nuestra vida pasada, fue un sueño hermoso.

Hoy por pura curiosidad intenté otra vez conectarlo a la computadora, sabía que iba a ser inútil y no había ninguna esperanza.

Lo conecté y la pc nisiquiera lo reconocía. La puta que te parió pensé. Después de un rato navegué por Internet, me había olvidado de que estaba conectado, pasó un rato y de pronto una sensación familiar apareció... 

La computadora se ponía lenta, pero no el lag de mierda que tiene Infinitum y su compañía del monopolio, esta vez era diferente, era algo como he dicho: familiar.

Vi el itunes y se estaba sincronizando, eso me extrañó muchísimo, vi el ipod y entonces la flecha que daba vueltas en un círculo anaranjado estaba ahí, saludándome amistosamente, después de semanas de no habernos visto...

El Ipod video de 160 GB que había apodado ''Cerati'' de cariño y por el cual lloraba todas las noches (y todos los ratos de aburrimiento) había despertado, había regresado iluminado por un resplandor milagroso y  celestial con un millón de querubines y ángeles desnudos y bellos a su alrededor cargando su pesada maquinaría.

Los cielos se despejaron, los pájaros cantaron a pesar de que ya era de noche y el América perdió ante los ojos de miles de delincuentes y bicitaxeros que aman tal equipo. El mejor día del 2013, o del siglo entero es hoy. 

 Yo decreto este día como trascendental para todas las religiones de todo el planeta como el día más milagroso del siglo. 

Si tienes un Ipod cuídalo y amalo a más no poder, si te gustó esta historia compártela y sígueme en Tumblr. http://srselfdestruct.tumblr.com/

Gracias.